Importancia y trascendencia del beato Federico Ozanam 4to B Sec. Comunicación

 

Importancia y trascendencia del beato Federico Ozanam

Hoy me toca escribir acerca de un personaje interesante dentro de la Familia Vicentina. Federico Ozanam es quizá una de las mayores figuras del laicado católico del siglo XIX. A pesar de su corta edad (vivió hasta los 40 años) la buena fama ganada entre sus compañeros nos habla de un hombre inteligente, sabio y profundamente comprometido con los valores cristianos tales como la solidaridad con el prójimo y su afán por compartir la alegría de la fe y la evangelización en todos los ámbitos de su vida. Hoy explicaré por qué considero a Federico Ozanam como uno de los precursores de la figura del intelectual cristiano.

La vida de este beato nos demuestra que es posible llevar una vida de fe católica y al mismo tiempo adquirir y compartir nuevos conocimientos. Federico Ozanam se caracterizaba por su espíritu curioso e investigador, amante de las ciencias y la literatura. Prueba de ello son sus numerosos libros y ensayos que hablaban acerca de la importancia de la dignidad y el respeto dentro de las relaciones laborales y sociales humanas.

Asimismo, durante su juventud, especialmente durante su etapa universitaria, existieron muchas corrientes ideológicas, pero no significa que haya aceptado todas ellas indiscriminadamente. Él, consciente de haber nacido y crecido dentro de un hogar cristiano, no podía ignorar las primeras enseñanzas sobre el amor a Dios y al prójimo como a sí mismo. Por lo que, junto con sus amigos, a modo de conferencias, analizaron, investigaron y discernieron delicadamente para saber si lo que proponían las diversas corrientes o ideologías presentes en su época estaban en contra o no de la doctrina católica. Años más tarde fundarían juntos la Sociedad de San Vicente de Paúl, que se mantiene hasta nuestros días, para compartir la alegría de la fe, la caridad y la evangelización.

 Federico se destacó en todos los ámbitos de su vida. Como padre de familia, supo hacer de su hogar una verdadera iglesia doméstica, fue un excelente ciudadano y cumplidor de sus deberes cívicos. Su labor escolar ha quedado algo ignorada debido al énfasis que ponen los historiadores en su labor social, pero según explica Juan Pablo II, tanto en su desempeño como universitario y posteriormente como profesor de universidad en Lyon y en París, era un hombre que siempre se caracterizó por su búsqueda de la verdad, defendiendo eficazmente sus puntos de vista, pero también respetando a las personas que no compartían los suyos. 

 En conclusión, podemos definir la figura del beato Federico Ozanam como un hombre cuya vida fue verdadero testimonio de caridad, entrega y servicio para con el prójimo al igual que San Vicente de Paúl. Asimismo, gracias a su afición por la literatura, marcó las bases del nuevo pensamiento de su época, que defendía la justicia social y el trato equitativo antes que la limosna. Que su vida nos inspire como modelo de caridad con los pobres y necesitados, y al mismo tiempo ser los nuevos pensadores que marquen tendencia y sepan encontrar solución a los problemas sociales presentes en nuestro país.

Valeria Corrales 4B